domingo, 5 de junio de 2011

NOTA DESDE PERÚ: "NO HAY MIEDO CON HUMALA"

Para nadie es un secreto que la situación democrática en Perú durante los últimos años ha sido motivo de preocupación para la región, Gilbert Zabalbeascoa Marroquín, comunicador social del país andino y corresponsal de este blog responde las inquietudes en este día especial para nuestros amigos peruanos.

¿Cómo vive el Perú esta elección presidencial tan peleada que a través de sus reportes ha descrito?
Ya ahora con los resultados conocidos, no oficiales, aclaro, hay un sentimiento entremezclado: algarabía por el lado de los humalistas, tristeza y frustración por el lado fujimorista, y en otro segmento me atrevería a decir que hay incertidumbre por lo que puede venir adelante.

Durante el seguimiento de las elecciones se pudo observar que algunas páginas Web de diarios peruanos, han marcado la preferencia por uno u otro candidato. ¿Es habitual que se presente abiertamente la posición política de ciertos medios?
No. La verdad que no, esto más que nada obedece a un plan al cual nos tendríamos que remontar a la década del noventa, es decir, durante el decenio de Alberto Fujimori. Su asesor, Vladimiro Montesinos Torres, jefe del Servicio de Inteligencia de mi país; cimentó una prensa monolítica en favor de Fujimori, la cual servía para desvirtuar a los opositores al régimen fujimorista, y no solo desvirtuarlos, sino también mancillar su honor para que éstos pierdan credibilidad dentro de la población. Tras su salida abrupta del poder, esta prensa estuvo ahí expectante a la salida de un representante del fujimorismo, en este caso fue Keiko quien recibió el apoyo de este sector que, sin lugar a dudas, no merecen ser llamados periodistas. Porque creo no se puede orientar el voto, ahí se deja de ser periodista y se convierte en un operador de masas.

¿Qué espera el pueblo peruano del presidente Ollanta Humala Tasso?
Es una pregunta hasta cierto punto compleja dependiendo del ángulo con la que se quiera responder. Como ciudadano de la calle te diría que espero, en lo personal, un manejo responsable de la economía, es decir que se sigan firmando diversos tratados de comercio que sean para el bien de los más necesitados. Si él le demuestra al pueblo peruano que de verdad quiere cambiar al país, el pueblo lo respaldará y lo mirará con buenos ojos.

Días atrás comentaste que Humala Tasso podría poner mano dura en tu país, enderezarlo, darle un nuevo orden. ¿A qué te referías con aquella declaración?
Me refería a que dada la formación militar de Humala podríamos esperar una suerte de militarismo democrático, es decir: mano dura e implacable ante la corrupción de funcionarios, delitos agravados de cualquier índole; mejoras en el sistema educativo y un inicio de cambio empezando desde abajo, desde la niñez, eso es primordial al menos en un país como en el Perú de hoy. De hecho, si bien el voto es secreto no tengo problemas en expresar que voté por Humala porque no quería que Fujimori gobierne mi país

¿Cuáles eran tus razones para que Fujimori no gobierne Perú?
Porque durante ese periodo el gobierno de Fujimori fue uno de los más corruptos de toda la historia republicana en el Perú. Él decía, y sus seguidores dicen, que acabó con el terrorismo pero no fue así; Claro, disminuyó, pero disminuir no es lo mismo que acabar. Ese hombre nunca se supo si era peruano, si cuando renunció en el 2000 lo hizo por fax dicho sea de paso, no tuvo ni la hombría de hacerlo no solo directamente al pueblo, y peor aún, lo hizo desde el extranjero; ¿qué tipo de presidente es ese?. Sin contar los abusos a los derechos humanos y el 54% de pobreza que dejó al abandonar su mandato. Ese es el Perú que, al menos yo, como elector y como comunicador social, no quisiera ver. 

  ¿Qué le espera a Keiko Fujimori ahora?
La verdad que me ha sorprendido gratamente su participación. Digo gratamente porque siempre es bueno que surjan líderes jóvenes con ideas frescas. Creo que pesó en ella el apellido Fujimori, algo que ella misma dijo el domingo pasado en un debate, su apellido es una cruz sobre su espalda y tendrá que bregar duro y fuerte en la próxima campaña presidencial del 2016 si se llegase a presentar.