domingo, 26 de junio de 2011

ADIÓS RIVER PLATE...VOLVERÁS!

Cuesta encontrar palabras para explicar lo que se ve en este momento en la Tv. No me quiero imaginar cómo se estarán sintiendo los amigos riverplatenses que en este momento están abandonando el Monumental de Nuñez. Veo en Fox Sports los rostros de los jugadores entrando al vestuario y la verdad que es por demás chocante ver la imagen. Carrizo, Pavone, Almeyda, están destrozados, ví que costó por un momento ayudar a levantarse a uno que otro jugador en el gramado.

River se ha ido,amigos(as) lectores(as); una historia plagada de éxitos, partidos históricos y que por la mala gestión de los directivos, y en especial (y llamativamente) de uno de sus ídolos, Daniel Alberto Pasarella. Por el momento, y completamente fuera de lugar, se están registrando incidentes en las afueras del estadio de Nuñez. Dentro del estadio también hay desmanes, un fuerte grupo de enardecidos hinchas están intentando entrar a la zona de la platea para agredir a los dirigentes, por lo pronto ya hay un policía herido.

Pero vamos al fútbol, el mismo que tuvo que ser interrumpido a los 44' del segundo tiempo ya que los hinchas de la banda amenazaban con entrar a la cancha. Impotentes tal vez por lo que veían en la cancha: un equipo que no podía superar al Belgrano en el campo que tuvo en Olave, Manzanelli, Rodríguez y Pérez a sus principales baluartes en la zona posterior. Los dirigidos por López no daban pie en bola, si bien a los 6' del primer tiempo Pavone abrió el marcador, esto no sirvió para permanecer en la división rentada. Su fútbol por demas previsible, con ataques 'cantados' y no sirvieron para vulnerar a un extraordinario meta como lo es Olave. Peor aún cuando a los 24' del segundo tiempo, Pavone erró la pena desde los doce pasos, desde ese momento el equipo del barrio de Nuñez se vino abajo moralmente y se veía desbordado por el equipo celeste. 

Los últimos minutos ya eran para el 'decorado' del partido: los riverplatenses trataban de vulnerar la valla de Olave, de hacer el milagro; en la tribuna la gente cantaba cada vez más fuerte y de manera orgullosa el  "Soy de River...." , mezclado con la rabia y  lágrimas en los ojos, una imagen por demás chocante.

Se va River Plate, se va un grande de América y del mundo pelotero y quienes gustamos del fútbol esperamos y sabemos que la banda volverá por sus fueros.